Fisioterapia para enfermedades respiratorias
La fisioterapia respiratoria es una rama de la fisioterapia y se define como el grupo de técnicas que mediante ejercicios, actividad física o el uso de agentes externos buscan prevenir o reducir la acumulación de mucosidades o cualquier otro tipo de patología del sistema respiratorio. La finalidad de esta terapia es lograr que el sistema respiratorio del paciente logre una mejoría y adicionalmente que se mantenga en condiciones óptimas tras la rehabilitación. Este tipo de terapia resulta ser económica, efectiva y los pacientes muestran un porcentaje muy bajo de efectos secundarios.
El origen de esta disciplina como se conoce en la actualidad se encuentra en Bélgica, Francia, y Estados Unidos, países en los que su denominación como disciplina se remonta a finales del siglo XX. Esta es un área que se encuentra en continuo crecimiento, debido a que los avances científicos y las nuevas tecnologías proveen mayores y mejores instrumentos para favorecer las sesiones de terapia, así mismo la demanda de terapeutas respiratorios ha incrementado notablemente en los últimos años.
Técnicas de fisioterapia respiratoria
Las técnicas que se usan en este tipo de terapia se agrupan en cuatro grandes categorías: la permeabilidad de la vía aérea, la kinesiterapia respiratoria, las técnicas de entrenamiento muscular y las ayudas mecánicas. Dentro de las técnicas de permeabilidad aérea se encuentran procedimientos como las técnicas con variaciones de flujo, las técnicas que utilizan la fuerza de gravedad y/o las ondas de choque y los coadyuvantes instrumentales.
Por otra parte la kinesiterapia respiratoria consiste en reeducar al paciente para que modifique sus hábitos respiratorios y de este modo el proceso se haga más efectivo en tanto las técnicas de entrenamiento muscular buscar establece un programa de entrenamiento físico (ejercicios de resistencia) acorde con las características personales que le permita al paciente mejorar su resistencia y por ende sus hábitos respiratorios, debido a que una buena respiración aportará suficiente oxígeno al cerebro y a los diferentes órganos, todo esto se traducirá en mayor energía, lo que es fundamental para mejorar la salud.
Finalmente las ayudas mecánicas se refieren a cualquier mecanismo usado para mejorar la respiración del paciente, para esto es necesario valerse de aerosoles, fármacos inhalables, broncodilatadores, mucolíticos, antibióticos y antiinflamatorios.
La frecuencia de las sesiones de esta terapia generalmente es de dos al día pero cada caso particular tiene un tratamiento diferente sugerido por el médico, se sugiere que las sesiones terapéuticas sean antes las comidas para evitar vómito o reflujo.